En el río se ve una gabarra, que en aquellos años era el medio utilizado para transportar la mercancía que se utilizaba, y en el lado izquierdo se ve el típico pueblo pesquero vasco, el entonces municipio de Begoña a escasos 1500 metros de Bilbao, al cual se anexó en 1924, la iglesia que sobresale es la de Begoña.
La llegada de la industrialización supuso que viniera mucha gente de otras provincias españolas a trabajar, gente que vivía en la misma margen derecha ( según vemos la foto) hacinados en barracones.
Esta situación supuso un claro enfrentamiento entre dos culturas, por un lado los habitantes del pueblo, que seguían siendo carlistas, hablaban euskera y tenían la religión católica por bandera, y por otro lado los obreros, mayoritariamente de fuera y de ideas socialistas. Esto también supuso el principio del nacionalismo vasco.
Mi valoración es: que esta industrialización fue totalmente positiva pese a los conflictos que trajo, porque gracias a estas empresas y sobre todo a sus trabajadores, que trabajaban en condiciones pésimas, hoy podemos disfrutar de una calidad de vida que esta gente ni siquiera hubiera podido imaginar.
Cambia el fondo, o el color del texto. (Antes de que valore el blog)
ResponderEliminarEsto es otra cosa. Eskerrik asko.
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